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Saldos negativos e ingresos ocultos.

Imagina que recibes una carta de la Agencia Tributaria (AEAT) y la inspección te pregunta sobre las entradas de fondos en cuentas, los cobros por TPV (terminales de punto de venta) y las imposiciones que haces en el banco. Esto está ocurriendo y en este vídeo vamos a analizarlo.
La AEAT ha empezado a enviar comunicaciones informativas, basadas en estudios detallados de movimientos bancarios, sobre todo en sectores como la hostelería y el comercio. Estas comunicaciones, cuando no directamente revisiones, suelen señalar posibles inconsistencias entre los ingresos declarados y los movimientos de cuentas, cobros por TPV o imposiciones, todo con el objetivo de que revises o expliques si estás declarando correctamente.
Básicamente, comparan los ingresos que declaras en tu IVA, IRPF, o sociedades con los que ellos observan en tu cuenta bancaria. Es decir, pueden verse diferencias continuadas que implican ingresos no declarados.
El problema está en que la AEAT, basándose en esos movimientos bancarios, muchas veces considera que la totalidad del «debe» de la cuenta podría ser ingresos sujetos a tributación, y ahí empiezan las posibles dudas a veces difícilmente explicables.
¿Pero qué pasa si hay saldos negativos en la cuenta de bancos? ¿Cómo puede funcionar una empresa con saldos negativos de Tesorería? Ahí, lo que le estás diciendo a la AEAT es que hay cantidades sin facturar, le estás diciendo la cantidad ocultada, y sinceramente eso pinta mal.
En conclusión, este tipo de cartas son más un aviso para que revises tu contabilidad y ajustes lo necesario. Si todo está en orden, lo mejor es mantener la calma y tener a mano la documentación por si la AEAT decide ir más allá en su revisión. ¡Recuerda! Ser transparente y estar preparado es clave para evitar problemas mayores con Hacienda.